Cómo ser una madre productiva trabajando desde casa.

Trabajar desde casa siendo madre es un gran reto ya que estar con la familia y ser eficiente laboralmente a la vez puede resultar un poco complejo; más que todo con el manejo del tiempo. Organizar la casa; dejar listos a los niños; educarlos y al mismo tiempo trabajar es bastante agotador y es un alivio ya no tener que ir a una oficina; lo cual evita el transportarse por la congestionada ciudad en horas pico; gastar dinero en desplazamientos; correr para no llegar tarde; además permite pasar mucho más tiempo con los hijos que antes.

Teniendo en cuenta también que el trabajo remoto tiene sus ventajas y desventajas por este motivo hay que saber mantener un equilibrio laboral y personal. Psicológicamente se siente muy bien ser madre; a la vez trabajar y en ocasiones cumplir con las labores de la casa; esto brinda un sentido de independencia; porque la llegada de un hijo no significa que se dejará de luchar por los sueños; todo lo contrario; ellos son el gran motor que motiva a seguir adelante con los propósitos.

“La libertad es muy dura; y viene acompañada de la procrastinación; la mala gestión del tiempo; el sedentarismo; la ansiedad; la apatía; el miedo. ¿Cómo superarlos? de los problemas fundamentales es la procrastinación: la tendencia a dejar para mañana (o más tarde) lo que podemos hacer hoy (o ahora mismo)” –Sergio C. Fanjul

Disposición mental y manejo del tiempo

Cuando se hace la migración de trabajo presencial a trabajo remoto; se pueden presentar ciertas emociones dependiendo de la personalidad de cada ser humano; por eso hay que saber manejar las emociones. En este caso; para las madres; el desafío más grande es saber equilibrar el tiempo de madre y el tiempo de trabajo porque trabajar desde casa implica que los hijos siempre verán a su mamá; están mucho más emocionados y felices; lo que quiere decir que ellos siempre van a querer pasar tiempo con su madre; buscando hacerla parte de cada actividad que a ellos se les ocurra. Por lo tanto; es importante saber manejar el tiempo y enseñar a los hijos a respetar los espacios laborales para poder establecer horarios que faciliten tener una mayor concentración sin dejar a un lado esos pequeños lapsos de tiempo para compartir con ellos.

Organizar la agenda

La idea es establecer un horario y distribuir el tiempo para cada una de las actividades y tareas pendientes para establecer propósitos diarios y lograr metas.

Los siguientes son 3 tips útiles para organizar una agenda.

• Establecer horarios específicos para levantarse y acostarse
  ¡No es tan fácil! Requiere de esfuerzo; disciplina y constancia pero se puede hacer el intento; esto le puede enseñar a tu mente a actuar involuntariamente al haber creado una costumbre. Todo empieza por educar la mente y el cuerpo para mantener un estado óptimo; asegurándose de haber descansado lo suficiente.
• Prepararse para “ir a trabajar”
  No es lo mismo trabajar sin bañarse y en pijama; la recomendación es prepararse tal cual como cuando se iba a la oficina: levantarse; darse un baño; cepillarse los dientes; arreglarse; maquillarse y aplicarse el perfume. Este tipo de hábitos que se tenían cuando era necesario desplazarse hasta la oficina se deben adoptar para esta nueva modalidad. Acostumbrarse a estas actividades ayuda a mantener más el orden y la actitud para el trabajo; incluso los hijos al observar estos hábitos empiezan a familiarizarse más con los procesos y las rutinas que usa la madre para trabajar ayudándoles a comprender y respetar más el espacio de trabajo de su madre.
  
• Escribir la rutina diaria
  Hay mil cosas en la cabeza cuando de trabajar y ser mamá se trata; por eso es recomendable llevar una checklist con la rutina y los pendientes del día en una agenda; tablero o de manera digital; esto lleva a ser más organizadas; tener más motivación y claridad para hacer nuevas tareas que ayudan a definir proyectos.

Tener un espacio adecuado para trabajar.

Trabajar desde casa requiere de mucha concentración ya que hay muchas distracciones; por eso es esencial tener un espacio exclusivo para trabajar al cual sólo tú tengas acceso y así evitar interrupciones. Quizás todas las madres no cuentan con un espacio privado para trabajar y toca compartir el espacio con los hijos; lo cual no es buena idea; pero se pueden definir barreras cuando se esté trabajando para que poco a poco ellos lo entiendan.

No sobrecargarse de trabajo

Asumir demasiadas responsabilidades laborales o del hogar puede conllevar a un estrés y a no ser productiva; por esta razón hay que tener muy claras las prioridades para poder realizar las tareas efectivamente.

Buscar apoyo en caso de ser necesario

Este punto depende mucho del tipo de familia; ya que todos los hogares son diferentes.

En el caso de las madres solteras y que sus hijos aún requieren de mucha atención; es necesario el apoyo de un familiar; una niñera o acudir a una guardería que cuide de los hijos. En el caso de que ambos padres tengan un alto flujo de trabajo y los niños también requieren de mucha atención; se debe recurrir a la misma ayuda.

Sin embargo; si tus hijos ya están un poco más grandes y van al colegio; tienes suerte; porque así no tendrás que ocuparte tanto del cuidado de tus hijos; del pago de costosas guarderías con horarios extendidos ni tampoco niñeras.

Salir de casa y despejarse.

Claro está; siempre y cuando se pueda y se tenga el espacio es recomendable salir de casa para despejarse y distraerse un poco; pues es realmente necesario para recargar energías y disminuir el estrés. Por supuesto; todo esto teniendo presente la rutina diaria y dependiendo de la carga laboral que se tenga. Por eso mismo; hay que saber manejar los espacios y los tiempos para así ser bastante productivas y cumplir con los objetivos.

Crear actividades para los hijos

En los lapsos de tiempo que se dediquen para compartir con los hijos tiene que ser tiempo de calidad; ya que para dedicarse al trabajo habrá mucho tiempo. Incluso; si los hijos ya están un poco más grandes y entendidos; podemos enseñarles algo de nuestro trabajo; qué es lo que hacemos; por qué lo hacemos y cuáles son las responsabilidades que debemos de cumplir.

Saber aprovechar los momentos para compartir con ellos será vital tanto para una madre como para sus hijos. Hay que proporcionar los medios para que ellos se entretengan; se distraigan y aprendan a la vez. Con este fin; se pueden utilizar diferentes recursos como por ejemplo:

• Libros
• Música
• Canto
• Cocina
• Pintura
• Dibujo
• Videos educativos o tutoriales
• Tocar un instrumento musical
• Juegos didácticos
• Obras de teatro
• Oficios del hogar y entre muchas actividades más
  

Que la siesta de los niños sean provechosas para ti

Mientras los niños toman las siestas hay que aprovechar para poder hacer los trabajos con mayor carga cognitiva; porque es el momento perfecto donde se puede enfocar completamente la concentración; la dedicación y el esfuerzo a las labores. Así que cuando organices tu agenda y la siesta de tu pequeño tiene un horario establecido; escribe esas tareas o asuntos pendientes en esos tiempos de descanso.

Buena comunicación con el equipo de trabajo

Para poder ser una madre productiva; debes de comunicar todas las dudas que te surjan o si hay algo que te impida en un momento específico trabajar al ritmo que siempre llevas; debe ser comunicado para que así el equipo no asuma que todo anda bien y te puedan brindar una solución o el espacio necesario para poder resolverlo. Hay que mantener todo en sintonía y establecer una comunicación efectiva con el equipo.

Por ejemplo; si los hijos se enferman las prioridades van a cambiar porque si hay un niño en casa siempre va a requerir mucha más atención y se debe reorganizar los planes que se tenían programados y comunicar al equipo dicha situación. Así como este tipo de imprevistos pueden suceder muchos más.

Adicional a eso; no todo tiene que ser trabajo. Cuando tenemos un equipo remoto; nacional o extranjero; el contacto físico no existe; o por lo menos en ese instante; por eso es saludable también conversar con el equipo y hablar temas diferentes a los laborales; por ejemplo; preguntar por su familia; por su cultura y tradiciones; conocer cómo se sienten y cómo llevan el proceso de trabajo remoto y entre otras cosas más que pueden hacer amena una conversación.

En Mavity nos gusta hablar y mantenernos al tanto; para apoyarnos y ser lo más productivos posible.

Trabajar remotamente siendo madre no siempre resulta ser perfecto; ya lo mencionamos; pero trae consigo muchas recompensas tales como poder manejar tu tiempo; compartir un poco más cerca de tu familia e hijos; no perder tiempo en desplazamientos hasta la oficina; entre otras cosas más; de igual manera ahora hay que tener el doble de disciplina para trabajar en casa; cuidar el horario de trabajo y ser muy equilibrado con la vida familiar y laboral.

Te invitamos a tener en cuenta estos consejos para ser más productiva mientras trabajas en casa y estás cerca de tus hijos.